Cuando las personas eligen ponerse detrás de las ruedas de los vehículos cuando están intoxicadas, corren el riesgo de no verse involucradas en un choque y estarán lo suficientemente seguras para llegar a casa. La verdad es que, cuando las personas conducen ebrias, son un peligro para ellas mismas y para los demás.
Incluso con niveles más bajos de alcohol en el cuerpo, pueden producirse algunos efectos que disminuyan las habilidades de conducción efectivas de la persona. Con solo un .02 concentración de alcohol en sangre, la gente pierde algo de juicio, está más relajada y tiene un estado de ánimo alterado. Por .05, el control de los músculos pequeños, como el enfoque de los ojos, se ve obstaculizado. Con un estado de alerta reducido y un juicio deteriorado, eso puede afectar la conducción incluso estando por debajo del límite legal.
Por supuesto, cuando una persona alcanza un BAC de .08, el razonamiento, el juicio y la memoria se deterioran y pueden comenzar a poner vidas en riesgo. Si una persona se registra en .08, es justo decir que el alcohol en el sistema también puede seguir aumentando, especialmente si la persona ha dejado de beber recientemente. Las percepciones deterioradas, la pérdida de la memoria a corto plazo y la falta de concentración también pueden hacer que la conducción sea un riesgo para las personas en este estado. Ahora, otros también están en riesgo, porque el conductor no puede responder al tráfico de la manera que debería, lo que significa que es más probable que el conductor cause o se vea involucrado en un accidente.
Nuestro sitio web tiene más información sobre lo que puede hacer si ha perdido a un ser querido debido a un conductor ebrio. No debería tener que enfrentar tal circunstancia, especialmente porque beber y conducir es una opción. Usted se merece la representación que necesita, por lo que puede ser compensado por sus pérdidas.
