Parte del problema es el agotamiento. La proporción de miembros de la tripulación por pasajeros ha empeorado constantemente en las últimas décadas en un intento por reducir costos. A los miembros de la tripulación a menudo se les pide que trabajen de 12 a 14 horas al día, los 7 días de la semana durante meses a la vez. No es razonable esperar que los empleados exhaustos tomen las decisiones correctas en situaciones de emergencia. Otro problema es la formación insuficiente. Muchos empleados de líneas de cruceros se quejan de la capacitación en seguridad impartida en un idioma que no entienden. La industria de los cruceros, aunque atiende principalmente a pasajeros estadounidenses, está compuesta en gran parte por trabajadores extranjeros.
Queda por ver si este desastre será suficiente para obligar a la industria de cruceros a adoptar medidas de seguridad. Con docenas de personas desaparecidas y 11 muertas confirmadas, este accidente de Carnival Cruise Lines debería ayudar a muchas personas a ver los riesgos inherentes a esta industria. Para las familias de los desaparecidos y fallecidos, cualquier medida de seguridad que se adopte llegará demasiado tarde.
Fuente: The Newsweek / Daily Beast, “El desastre de Costa Concordia trae una mirada dura a la seguridad de los cruceros, ”Por Eve Conant, 23 de enero de 2012