Simon Rider, un hombre de familia y padre de dos hijos, acompañaba a un amigo en una llamada de servicio en un campo de golf en enero de 2013. Cuando el amigo que conducía el carrito de golf hizo un giro repentino, violento e inesperado a la izquierda, el Sr. Rider salió disparado del carro. El Sr. Rider fue expulsado y aterrizó de cabeza sobre el pavimento de asfalto. Como resultado, sufrió una lesión cerebral traumática y una inflamación severa del cerebro. El Sr. Rider fue trasladado de urgencia a un hospital local para recibir tratamiento de emergencia.
Los médicos instalaron un monitor de presión intracraneal diseñado para medir la presión dentro del cráneo del Sr. Rider. Su preocupación era que a medida que el cerebro se hinchaba debido al trauma, el tejido se comprimiría y causaría un daño cerebral permanente. Los médicos no tuvieron más remedio que realizar una craneectomía o la extirpación permanente de parte del cráneo del Sr. Rider. Esto se hizo para permitir que el cerebro se expandiera temporalmente más allá de los límites normales del cráneo. Una porción significativa del cerebro del Sr. Rider estaba tan dañada que el tejido comenzó a morir y tuvo que ser extirpado. El Sr. Rider se quedó con déficits cognitivos severos y permanentes.
Panter, Panter & Sampedro, PA, contrató a expertos en reconstrucción de accidentes junto con expertos en física y expertos médicos para demostrar no solo que el conductor del carrito de golf fue negligente, sino que la lesión cerebral traumática ha alterado para siempre y permanentemente la vida del Sr. Rider. Después de completar las declaraciones y probar el caso, este asunto se resolvió parcialmente en mediación por $4 millones. Los ingresos del acuerdo proporcionan un flujo de ingresos para darle al Sr. Rider la protección financiera y el apoyo que necesita para el resto de su vida.
El Sr. Rider resolvió su caso contra el dueño del carrito de golf bajo la doctrina de instrumentalidad peligrosa por $3 millones adicionales. Bajo la Ley de Florida, el propietario de un carrito de golf o un automóvil es responsable por la negligencia del operador de ese vehículo. Brett Panter quisiera agradecer a Paul Finizio de Finizio & Finizio Law Offices, PA, por pedirnos que participemos en este caso. Agradecemos la oportunidad de trabajar con el Sr. Finizio para marcar la diferencia para el Sr. Rider y su familia.
1 Los nombres reales de las partes se han retenido debido a acuerdos de confidencialidad exigidos por los demandados.
