El uso de teléfonos celulares se está convirtiendo en una parte integral de la vida cotidiana de muchos estadounidenses. El aumento en accidentes automovilísticos causada por conductores que enviaban mensajes de texto, hablaban o se distraían de alguna otra manera con sus teléfonos es una señal segura de ese hecho. Una nueva arruga en las demandas contra los conductores distraídos que hieren o matan a otros con sus acciones es que los abogados persiguen la compensación de los empleadores que conocen o dependen de los empleados que usan teléfonos celulares mientras conducen. Las empresas han sido responsables durante mucho tiempo de ciertos actos cometidos por sus empleados. Este es solo el último paso para garantizar que todas las partes responsables rindan cuentas por el daño causado por la conducción distraída.
Los casos involucran algo más que vendedores ambulantes o conductores comerciales. Los teléfonos emitidos por la empresa, los automóviles emitidos por la empresa y cualquier persona que esté haciendo una llamada comercial, incluso en sus automóviles privados con sus teléfonos personales, podría implicar a sus empleadores con la conducción distraída. Las demandas van contra empresas que están al tanto de una situación peligrosa y no están haciendo nada para prevenirla.
Varias empresas, incluidas UPS, Chevron, DuPont y Time Warner, han prohibido el uso de teléfonos móviles por parte de los empleados mientras conducen. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte recomendó que todas las empresas hicieran tal prohibición y muchas empresas han comenzado a hacer lo mismo. Los beneficios en productividad obtenidos al hacer que los empleados usen el tiempo de viaje para hacer llamadas comerciales y completar otros negocios de la compañía por teléfono ahora pueden verse superados por la posible exposición a responsabilidad civil si ocurre un accidente.
Fuente: The Journal Gazette, "El uso de celulares al volante genera responsabilidad", 27 de mayo de 2012