Si los peligros en el lugar de trabajo se pueden identificar con la suficiente antelación, es posible evitar que se produzcan lesiones. El simple hecho de saber qué partes de su lugar de trabajo son peligrosas puede hacer que tenga más cuidado, para no lesionarse accidentalmente. Los peligros son parte de todos los días en el lugar de trabajo, pero ¿qué son exactamente?
Existen varios tipos principales de peligros en el lugar de trabajo. Los peligros físicos son lo primero en lo que probablemente piense. Se trata de cosas como partes móviles expuestas que podrían cortarlo o empujarlo hacia la maquinaria, cables eléctricos expuestos que podrían electrocutarlo o vibraciones que podrían hacer que los tornillos y pernos se aflojen y provocar un accidente.
Otro tipo de peligro con el que podría encontrarse es un peligro ergonómico. Estos peligros incluyen cualquier movimiento que pueda causarle lesiones debido a su posición. Por ejemplo, el levantamiento inadecuado y los movimientos de levantamiento frecuentes, la iluminación deficiente y las estaciones de trabajo mal diseñadas pueden ser peligros ergonómicos.
También existen peligros químicos y biológicos. Estos incluyen cosas como estar expuesto a gases o líquidos que pueden quemarle o causarle otras lesiones. Cosas como los ácidos se considerarían peligros químicos. Los peligros biológicos incluyen cosas como sangre, excrementos de animales, bacterias o virus, como los que puede encontrar en un laboratorio u hospital.
Los peligros siempre deben informarse de inmediato, para que puedan repararse de la forma que sea necesaria. Si se lesiona por uno, podría quedar incapacitado para trabajar o estar enfermo durante bastante tiempo. Será necesario proteger sus intereses después de una lesión para asegurarse de que reciba la atención adecuada después de un incidente.
Fuente: Da un paso, "Riesgos en el lugar de trabajo”, Consultado el 04 de junio de 2015.
